Y va a comenzar el tercer año de este blog. Ahora mismo me parece sorprendente, aunque ahí quedan las más de doscientas entradas y los miles de visitas… Son muchas horas de mucha gente alrededor de unas cuantas palabras ¿No es increíble?En este segundo año del blog he disfrutado enormemente. Se ha consolidado mi manera de contar las recetas, he incluido nuevas secciones y he hecho muchas actividades.

Cuando un blog está cumpliendo sus dos años de vida acumula muchas entradas y mucha información. Estos días me he entretenido en revisar las entradas más antiguas (¡qué interesante resulta!): a veces uno encuentra material aprovechable y otras veces, en cambio, da uno gracias de no haber abandonado la tarea y haber persistido en el empeño de hacer el pan mejor cada vez… y contarlo.
Entre las actividades ha habido, ante todo, variedad: he asistido a algunos cursos maravillosos en La Cocina de Babette. Su curso de baguettes al desnudo, impartido por la propia Beatriz Echevarría fue extraordinario y me dio muchas pistas sobre el formado en general (y no sólo sobre cómo hacer una buena baguette). Las habilidades y reflexiones que Beatriz compartió con nosotros durante el curso me han permitido mejorar mi técnica en otros muchos panes. Y además, asistí a un maravilloso curso de Donuts en la misma escuela, impartido por Miriam García, de El Invitado de Invierno: una perdición de curso, porque una vez que aprendes lo que se puede hacer en casa con tus manitas… es difícil resistir a hacer más y más donuts… hasta con masa madre.

Y por último, que no menos significativo en este año tan especial, ha sido el curso al que pude asistir en The Loaf: escuchar y ver trabajar a Dan Lepard, compartir dudas con otros panarras y atender a sus aclaraciones… ha sido una experiencia digna de ser contada una y otra vez. Este curso, corto pero intenso, dejó huella en muchos sentidos.

The Loaf fue además una de las panaderías en las que pudimos pasar una jornada, en este caso, de trabajo diurno. A lo largo del año, visité varias panaderías en las que pude aprender cómo es el proceso de panificación a pequeña escala, con producciones que van desde los 20 kgs a los 200 kgs. por noche. Son negocios artesanos a los que merece la pena dedicar atención. Llevan a cabo una gran labor de recuperación del buen pan, son negocios de emprendedores, que están dejando su impronta en la socieda. Y te hacen sentir pequeño, cuando manejas masas de apenas un kilogramo en casa. Eso sí, cuando participas en su trabajo desarrollas una práctica irrepetible: formar 50 hogazas seguidas o bolear cientos de panes de hamburguesa en una ratillo.

Y en este año he tenido varias oportunidades de hacer estas “prácticas” intensivas. Entre ellas, pude hacer dos visitas a Pablo Conesa Alternative Bakery (una en mayo y otra en octubre), una visita a Pan y Piú, otra a El Rincón Orgánico… por no dejar atrás -aunque no se trató propiamente de una visita panadera- la visita que hicimos en primavera a la Fábrica de Tortas de Aceite de Inés Rosales, para conocer el proceso de producción artesano que todavía aplican.

Durante este segundo año del blog, he ido enriqueciendo la sección de Libros y más con mis lecturas de cada estación del año: otoño, invierno, primavera, verano, … y dentro de nada estaré escribiendo la entrada del próximo otoño, una vez más. Libros y más libros de cocina, de historia de la alimentación, curiosidades gastronómicas, autores olvidados, obras recientes…

Y afortunadamente aún me quedan muchos libros escondidos en mi estantería de los regalos (los que voy comprando cuando veo algo especial, por si luego no los vuelvo a encontrar cuando se acerca una festividad: un ejemplo, el último ha sido una re-edición baratilla de una obra de Escoffier, que aguarda turno para ser y acabar bajo el árbol de Navidad). Y además me he aficionado a ir apuntando libros es una de esas “wish list” de Amazon o similar; y voy ya por… más de 500 euros que difícilmente podré comprar. Pero hace tanta ilusión ver esas maravillosas portadas de libros con los que sueñas por si un día aparecen por casa (¿hay alguien ahí que atienda la sugerencia?)

Dos han sido las grandes novedades de este año: una nueva sección y una nueva actividad.

La nueva sección decidí llamarla SOS. En ella quería recoger toda esa parte de información, que va apareciendo en las recetas y en algunas entradas específicas, relativa a los ingredientes, las técnicas y los procesos básicos de la panificación casera. Son fruto de lo que una va a aprendiendo por el camino: haciendo pan (mucho pan), leyendo (muchísimo), escuchando a los maestros (con placer y atención), observando el quehacer de otros (tantos blogueros…), …

En ese aprendizaje uno va reuniendo conocimiento y material, que las más de las veces son préstamos de otros blogueros, libros, maestros panaderos… y las menos son intuiciones que la práctica y los experimentos van confirmando. Así nació la sección SOS, para dar cabida a trucos y conocimientos que iban quedándose dispersos.

Tengo que confesar que hasta ahora ha sido una sección a la que no le he dedicado todo el tiempo que se merece. Falta mucho por hacer… y además parece que  otros han tenido una idea similar y andan construyendo sus “glosarios” básicos de panadería casera. Ademas de las maravillosa comunidad de El Foro del Pan (cuyas secciones sobre Ingredientes, Técnicas, Equipamiento y utensilios, Panificar con masa madre o La ciencia del pan acumulan más saber del que se puede digerir en estos dos años de vida de mi blog), otros foreros tienen secciones muy interesantes con aspectos técnicos, como La cocina de Babette, Bake the World o Panarras.En mi caso, no tengo un plan sistemático para ir abordando la sección: según hago mis experimentos o me siento a leer o investigar un tema, escribo una entrada para la misma. Recientemente me dediqué a crear de nuevo y observar, sacar fotos, reflexionar y sistematizar lo que sabía, había leído y experimentado sobre la Masa Madre. Y de ahí nacieron seis entradas, que abordan desde su creación a la panificación con la misma, el control de acidez, la conservación…. que ya he completado con una nueva aportación que he leído hace poco en Panarras (Haz pan y no mires atrás) sobre la MM, que me ha sido de la mayor utilidad y que tiene un enfoque diferente al que yo había trabajado.

Eso sí, en mi espíritu cartesiano, quiero que la sección -aunque completada poco a poco y a impulsos de mis intereses divagantes- tenga una sistemática y estructura que permitan localizar la información. Esa estructura forma parte de mi manera de entender lo que hago al panificar -ingredientes, procesos y utensilios-, sin que unos apartados sean más o menos importantes que los otros. Si algo me ha enseñado la experiencia es que cada detalle cuenta y ninguno es determinante. Prestándole atención a todos ellos mejora nuestro pan, pero cada vez debemos concentrarnos en mejorar alguno o la tarea se nos haría inabordable. Y por eso mismo, la sección se irá completando lentamente.

Y por último, que esto es más largo que un año de blog, en estos meses últimos me estrené como profe. Si no hubiera sido por la insistencia de una amiga con la que un día quedé para hacer pan… este proyecto no habría visto la luz. Y aquí están mis cursos:

Tras tres cursos básicos de pan con levadura, dos de masa madre, un curso a medida para un emprendedor… y pronto un curso de panes de fiesta, ya tengo que comenzar a diseñar el calendario y metodología de los próximos, ya en 2013.

El ritmo del año ha sido intenso, muy intenso. Y entre mis objetivos está hacer las cosas con calma, con serenidad, disfrutando cada una como si fuera la única, .. . pellizcando y saboreando cada experiencia.

Copyright EWPG

 

En el tercer año que comienzo quiero continuar esta aventura variopinta: recetas, lecturas, visitas y actividades, cursos (recibidos e impartidos)…Quizás cambien, eso sí, los equilibrios, las proporciones de unos y otros porque el tiempo es menos elástico que nuestras masas bien amasadas.

Y a todos los que habéis llegado hasta aquí, acompañándome,